Ya no hay vuelta atrás. Todos vimos el primer cambio de Twitter en su versión web, cuando al entrar aquella mañana de mediados de julio, el famoso pájaro azul había dado paso a una X aburridísima como logo de la red social. Elon Musk pulsó el botón del cambio antes de anunciarlo…
Días después, el icono de la aplicación cambió en nuestros dispositivos móviles y, desde hace unas horas, también lo ha hecho el nombre de la plataforma, en todas sus versiones.
Equis. Desde hoy, aunque accedamos a través de twitter.com en nuestros navegadores, la cruz girada lo inunda todo: metatags, nombre de la app, e incluso la denominación de la sociedad a pie de página. Aún se salvan determinadas referencias, como los avisos legales, pero todo indica a que Twitter desaparecerá del todo, como concepto, en un abrir y cerrar de ojos.
A los usuarios ‘de toda la vida’, personas anónimas, personalidades públicas, medios de comunicación, instituciones y empresas, nos ha pillado de sorpresa esta transformación repentina y, en apariencia, innecesaria. La red social, que nació a principios de 2006 y alcanzó popularidad en el mercado europeo tan solo 3 años después, llegó a nuestras vidas para cambiar la manera en la que nos comunicamos. Desde los 140 caracteres originales de cada tweet (¿cómo lo llamaremos ahora?), informar, opinar y relacionarse supuso un desafío (y oportunidad) para personas y marcas.
Con la llegada de una nueva propiedad y equipo directivo, la evolución de Twitter era un secreto a voces. Hace unas semanas sorprendió la limitación de consumo diario en nuestros feeds, deshaciendo los planes de comunicación de tantas marcas que utilizaban la red social para difundir sus mensajes.
Con el cambio de nombre e identidad de marca, Twitter (perdón, X… nunca nos acostumbraremos a esto) busca dar un salto cualitativo para integrar nuevas funcionalidades. ¿Era realmente necesario? El tiempo lo dirá.
Sea como fuere, Twitter ahora se llama X, TweetDeck, XPro, ya no tuiteamos (publicamos) y muchos nos referiremos a la famosa red social como en su día lo hicimos con Prince: El Artista Anteriormente Conocido Como Prince.